La portería del Real Madrid se está convirtiendo en los últimos partidos en un feudo inexpugnable imposible de traspasar para los delanteros contrarios. En Liga, campo de batalla de Diego López, el Madrid lleva 209 minutos sin encajar un gol desde que Griezmann lo lograse el pasado 9 de noviembre. El meta gallego ha mantenido su meta a cero en los dos últimos encuentros ligueros, ante Almería y Valladolid. También ha dejado su casillero a cero en los dos últimos partidos Iker, ante el Olímpic de Xàtiva en Copa y el Copenhague en Champions. El último tanto encajado por el capitán blanco data del partido ante el Galatasaray, en Champions, es decir, 232 minutos imbatido.